Tocino de cielo a presión
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Grabado de Antonia Letrán Helices |
Ingredientes
Cuatro yemas de huevo
Tres huevos enteros
Medio Kilo de azúcar (dos vasos)
Cuarto de litro de agua (1 vaso)
Modo de preparación
Pon en un cazo el medio kilo de azúcar, del que reservaremos dos o tres cucharadas para el caramelo, y añadéle el cuarto de litro de agua. Ponlo al fuego y deja que hierva a fuego bajo durante diez minutos. Reserva el almíbar.
Mientras tanto, bate en un cuenco las cuatro yemas y los tres huevos enteros. Añade el almíbar a los huevos batidos, poco a poco y al mismo tiempo
batiendo (no es preciso esperar que enfríe el almíbar).
Haz un poco de caramelo con tres cucharadas de azúcar y un poco de agua. Dispon el caramelo en un molde metálico y vierte sobre el mismo los huevos y almíbar batidos, despacio para que no se
mezcle el caramelo con los huevos. Cierra bien el molde.
Ahora pasamos a nuestra querida amiga, la olla a presión. Pon un poco de agua coloca el molde y deja que cueza al baño maría. Hervirá durante 20 minutos
con la válvula silbando o con la segunda rayita a la vista (según sea la olla).
Saca el molde de la olla, déjalo enfriar y cuando puedas, enfría en el frigorífico. Una vez frío, para
extraer el tocino de cielo de su molde, destápalo y dale unos
golpecitos hasta que notes que se ha despegado del molde. Coloca sobre el molde un plato boca abajo y con las dos manos dale la vuelta.
¿Por qué me gusta esta receta?
Es como un mimo.
No te lo recomiendo para todos los días pero si para aquellos días de fiesta que necesite de un colofón dulce.
Me gusta porque, aunque no es una receta de los lamparillas, es de Jose María Tourer, es como si lo fuera. El primo se presenta en casa con su fiambrera y nos lo desmolda y es como un truco de magia y nos hace volver a la infancia cuando el tocino se queda compacto, brillante, precioso y buenísimo.
Si la cocina es pura magia, esta receta, sin duda es uno de sus mejores exponentes.